Redacción Internacional.– Suleman Dawood, el joven de 19 años que murió junto a su padre -el empresario paquistaní Shahzada Dawood- a bordo del submarino que implosionó cuando intentaba acercarse a los restos del Titanic, había expresado sus dudas sobre la expedición y “no estaba muy convencido” de querer realizar ese viaje, según reveló su tía en una entrevista.
Azmeh Dawood, hermana mayor del millonario vicepresidente de Engro Corporation, contó a la cadena NBC News que su sobrino le había dicho a un familiar que se sentía “aterrorizado” por su inclusión en esa actividad de la empresa OceanGate Expeditions de bajar a unos 3.800 metros de profundidad del Océano Atlántico para observar la decadencia del barco hundido en 1912.
Sin embargo, según Azmeh, el estudiante universitario terminó aceptando el viaje porque coincidió con el fin de semana del Día del Padre y quería complacer a su progenitor, un fanático de la historia del Titanic.
“Pienso en Suleman ahí dentro, tal vez jadeando… Para ser sincera, ha sido paralizante”, dijo la tía del joven en el reportaje telefónico, donde describió a su sobrino como una persona de buen corazón.
La mujer también dijo que en los últimos años había perdido el contacto con su hermano pero que, al conocer la noticia de su muerte en las profundidades del mar, recordó el intenso amor que sentía por él. “Era mi hermanito”, dijo llorando, según NBC News. “Lo sostuve en brazos cuando nació”.
Azmeh reconoció que, desde muy joven, Shahzada estaba “absolutamente obsesionado” con el Titanic y no se sorprendió cuando supo que había comprado entradas para la misión OceanGate.