REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Un altercado entre vecinos de Costa Rica, terminó en tragedia cuando Otoniel Orozco Mendoza, un nicaragüense nacionalizado tico de 53 años, perdió la vida tras recibir múltiples disparos.
El agresor, identificado como Eduardo Ramírez Zamora, fue detenido en el lugar del hecho por las autoridades.
La disputa, registrada por cámaras de seguridad del condominio, fue la culminación de años de conflictos entre los involucrados. La situación escaló durante una discusión entre las esposas de los implicados, originada por la llave de paso del agua.
Mientras las mujeres discutían acaloradamente, Ramírez Zamora recargaba el arma que utilizó para disparar a Orozco Mendoza, quien había comenzado a agredir físicamente a Ramírez.
El enfrentamiento culminó con Orozco Mendoza recibiendo 14 disparos, falleciendo en el lugar de los hechos. Vecinos alarmados alertaron a las autoridades, quienes detuvieron a Ramírez Zamora inmediatamente en la escena del crimen.
Según Dayli Avendaño, cuñada de la víctima, los conflictos entre ambos vecinos eran constantes y ya se habían presentado denuncias por amenazas y acoso. «Ellos vivían en un constante enfrentamiento. Esto se veía venir», comentó Avendaño visiblemente afectada.
Eduardo Ramírez Reyes, padre del detenido, afirmó que su hijo había soportado años de acoso y agresiones por parte de Orozco. «Mi hijo no pudo aguantar más esta situación y tuvo que dispararle desafortunadamente», declaró con evidente preocupación por el futuro legal de su hijo.
Por otro lado, el abogado defensor de Ramírez Zamora, Andrés Durán, argumentó que su cliente actuó bajo un estrés acumulado debido a los constantes conflictos con la víctima.
«Eduardo actuó en un momento de desesperación y miedo. Los años de acoso y agresiones lo llevaron al límite», aseguró Durán.
La fiscalía ha iniciado las investigaciones correspondientes y se espera imputar cargos de homicidio a Ramírez Zamora.
Las autoridades han indicado que, a pesar de la defensa presentada, la alegación de defensa propia no aplicará en este caso, dado el uso excesivo de fuerza letal en la confrontación.
El trágico incidente ha conmocionado a la comunidad del condominio y ha puesto en relieve la importancia de resolver los conflictos vecinales de manera pacífica.
Las autoridades locales han reiterado su llamado a la calma y la convivencia pacífica entre los vecinos.
La investigación continúa, y la comunidad espera respuestas y justicia para la víctima y su familia.