Redacción Internacional.– Unicef, la agencia de Naciones Unidas dedicada a la protección de la infancia, teme que miles de niños puedan haber muerto en los terremotos ocurridos este lunes en el sur de Turquía y norte de Siria, dijo hoy un portavoz del organismo.
Hasta el momento, el mayor número de víctimas se registra en Turquía (más de 3.400 muertos y 21.000 heridos), pero la fuerte vulnerabilidad de la población afectada en Siria -como consecuencia de doce años de una guerra civil- preocupa particularmente a Unicef.
En Siria se han reportado 1.552 personas y otras 3.549 han resultado heridos.
Asimismo, trabajará de inmediato en identificar a los niños que se encuentren solos para reunirlos con sus familias o garantizarles protección.
Este semana, todos los colegios en las áreas afectadas de Turquía y Siria han sido cerrados, pero Unicef colaborará para que los niños puedan retornar a clases tan pronto como sea seguro hacerlo, lo que les ayudará “a recobrar cierto sentido de normalidad en medio del caos”.