Redacción Internacional.- La bebé nacida bajo de los escombros y rescatada cuando seguía unida por su cordón umbilical a su madre en una casa de Jandaris, en Siria, tras el devastador terremoto que se ha cobrado más de 6.000 vidas en Siria y Turquía, se recupera ya en una incubadora en un hospital infantil.
Ni sus padres ni sus cuatro hermanos sobrevivieron al derrumbe del edificio, según los lugareños que presenciaron su rescate en este pequeño pueblo en el norte de Siria. Se estima que el 25% de la población quedó reducida a escombros.
Los residentes de Jandaris, la ciudad del noroeste de Siria escucharon llorar a una bebé cuya madre parece que habría dado a luz cuando ya estaba enterrada bajo los escombros de un edificio de apartamentos de cinco pisos arrasado por el terremoto, según relataron a la agencia AFP varios familiares y un médico.