SEÚL. – Los equipos de rescate buscan este martes a un operario que permanece desaparecido a raíz del grave incendio que afectó el lunes a la planta de baterías donde trabajaba y que dejó al menos 22 muertos y ocho heridos, dos de ellos graves.
Los equipos de bomberos han pasado la noche registrando el interior del edificio de tres plantas y planean movilizar hoy unos 100 efectivos y perros para encontrar al trabajador desaparecido.
El lunes se produjo un fuego en la planta de la empresa Aricell en Hwaseong (45 kilómetros al sur de Seúl) que, ante el gran número de baterías primarias de litio -unas 35.000- en el interior del recinto, provocó un grave incendio que los bomberos tardaron casi cuatro horas en controlar.
Todos los fallecidos fueron hallados en el segundo piso de la planta, donde comenzó el fuego y donde se inspeccionaban y empaquetaban los productos terminados.
Diecisiete de las víctimas, incluido el trabajador que permanece desaparecido, tienen la nacionalidad china, mientras que cinco eran surcoreanos y uno laosiano, según el recuento actualizado de la policía del que ha informado la agencia de noticias Yonhap.
Un equipo conjunto de bomberos, policía o funcionarios va iniciar una investigación sobre el terreno para determinar la causa del accidente.
Aunque se desconoce aún cuál ha podido ser el origen del fuego, un trabajador que logró escapar del incendio y se encontraba en la segunda planta contó a los bomberos que de repente una de las baterías sufrió una combustión explosiva.
Esto habría podido generar una reacción en cadena dado el antes citado número de baterías de litio almacenadas en el recinto.
El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, visitó el exterior de la planta el lunes para ofrecer sus condolencias por las víctimas del que probablemente sea el peor accidente del sector químico en la historia del país.