BANGKOK (AP) — Un tribunal de Myanmar condenó el viernes a la líder derrocada Aung San Suu Kyi a tres años de prisión con trabajos forzados luego de declararla culpable de fraude electoral, agregando más tiempo de cárcel a los 17 años que ya cumple por otros delitos procesados por el gobierno militar.
El último veredicto también tiene consecuencias políticas potencialmente significativas para el partido Liga Nacional por la Democracia de Suu Kyi al prestar apoyo a las amenazas explícitas del gobierno de disolverlo antes de las nuevas elecciones que el ejército prometió para 2023.
El partido de Suu Kyi ganó las elecciones generales de 2020 con una victoria aplastante, pero el ejército tomó el poder en febrero siguiente y le impidió un segundo mandato de cinco años. El ejército sostiene que actuó debido a un presunto fraude generalizado en las urnas, aunque los observadores electorales independientes no encontraron irregularidades importantes. Algunos críticos del general en jefe Min Aung Hlaing, quien lideró la toma del poder y ahora es el principal líder de Myanmar, creen que actuó porque la votación frustró sus propias ambiciones políticas.