REDACCIÓN .-“Gracias por traerme de vuelta a la plaza” de San Pedro, dijo el papa Francisco a su enfermero por animarlo a realizar un último baño de multitudes a bordo del papamóvil el domingo, horas antes de su muerte.
El medio oficial de la Santa Sede, Vatican News, recogió este martes estas palabras que el primer pontífice latinoamericano dijo a su fiel enfermero personal, Massimiliano Strappeti, el Domingo de Resurrección.
Tras la tradicional bendición “Urbi et Orbi” desde el balcón de la basílica de San Pedro, Francisco realizó un inesperado paseo a bordo del vehículo papal entre los miles de fieles reunidos para celebrar la Pascua.
Pero antes de hacerlo, preguntó a su enfermero: “¿Cree que podré hacerlo?”. Strappetti lo tranquilizó y el papa recorrió durante casi 15 minutos la plaza, bendiciendo a su paso a los bebés presentes.