SANTO DOMINGO .-El partido Opción Democrática expresó su respaldo a las denuncias realizadas por comunidades de Cotuí frente a la tala masiva de árboles llevada a cabo por la empresa Barrick Gold en la cabecera del río El Naranjo. El partido calificó esta acción como un acto de depredación ambiental que pone en riesgo la biodiversidad, el derecho de las comunidades a acceder a agua limpia y la paz en la zona.
“Mientras el gobierno, la empresa y la comunidad están en un proceso de diálogo, Barrick Gold avanza con maquinaria pesada destruyendo una de las zonas de recarga hídrica más importantes de la zona. Esto no solo es incoherente: es una provocación inaceptable que fractura la confianza y sabotea cualquier intento de resolución pacífica”, expresó Eduardo Acevedo, Secretario de Organización del partido y quien ha acompañado a la comunidad en su proceso de defensa ambiental.
La organización advirtió sobre los impactos severos de esta deforestación. “Las cabeceras de los ríos son ecosistemas frágiles que juegan un rol clave en la filtración del agua, el control de la erosión y la preservación de hábitats. Al cortar árboles en esa zona, se pone en riesgo el abastecimiento de agua y se afecta directamente la vida de miles de personas río abajo”, añadió Acevedo.
Estas acciones se suman a un contexto de militarización, represión de la protesta pacífica y falta de transparencia en el proyecto de construcción de una nueva presa de cola. “No se puede hablar de diálogo mientras se arrasa con los árboles y se impone la fuerza. Esa no es la vía hacia la paz”, afirmó Acevedo.
El partido también denunció el silencio del gobierno ante las demandas de las comunidades por sus derechos ambientales y los conflictos durante los procesos de reubicación de las familias afectadas. “Ese silencio es cómplice. El Estado tiene la obligación de proteger el medio ambiente y los derechos de las familias de la zona, por encima de cualquier interés económico”, agregó Acevedo.
Finalmente, Opción Democrática reiteró su apoyo a las comunidades que luchan por la defensa del río El Naranjo y exigió al gobierno detener de inmediato esta depredación ambiental, garantizando la transparencia y la participación ciudadana en todas las decisiones que afecten el territorio.