Santo Domingo.– El ministro de Educación, Andrés Navarro, encabezó hoy el seminario-taller “Evaluación del Desempeño Docente 2017”, dirigido a los directores regionales y distritales del sistema educativo, escenario en el que aseguró que el objetivo de este proceso es, no sólo aplicar los merecidos incentivos a los maestros, sino, fundamentalmente, hacer un diagnóstico de las fortalezas y las debilidades para la mejora de la calidad educativa.
Navarro dijo que han pasado 9 años desde la última vez que se realizó este tipo de proceso de evaluación y en ese sentido, la idea es cumplir con el mandato de la Ley de Educación 66-97, la cual establece que debe hacerse cada tres años.
Precisó que “se pretende que esta evaluación sea bastante singular, que deje montado un sistema o una plataforma que facilite en el futuro una evaluación por desempeño ágil y con la calidad del diagnóstico que se levante”.
Al pronunciar el discurso central del acto, realizado en el salón Yarey del hotel Sheraton, Navarro abogó por que en el país se deje atrás la vieja práctica de ejecutar políticas públicas con baja calidad de la información sobre la realidad institucional, otras veces sostenida en modelos internacionales y, en otros casos, partiendo del criterio del incumbente de turno que tiende a hacer las cosas atendiendo sólo a su experiencia.
“Realmente le tengo temor a caer en esa lógica de gestión de políticas públicas basada en la especulación sobre la realidad, pues me interesa mucho basarme en evidencias científicamente identificadas sobre la problemática, a través de investigaciones con métodos e instrumentos rigurosos", subrayó.
Manifestó que la evaluación por desempeño no será para juzgar quién lo hace bien o mal, “qué maestro es bueno o malo, ese no es el interés. Más bien se pretende identificar debilidades y fortalezas en nuestro magisterio para saber dónde debemos hacer mayor énfasis en la formación continua de cara al desarrollo del nuevo Currículo basado en Competencias y a una gestión sostenida de los centros educativos”.
Indicó que el proceso requerirá de una estructura de gestión bien sintonizada, no sólo que domine el método y los procedimientos, sino que debe haber un compromiso y una profunda fe de que las cosas van en serio por el desarrollo del magisterio y de la calidad educativa del país.
“Es indudablemente un gran esfuerzo de todos, pero lo veo como una magnífica oportunidad que lo hagamos ahora, con el acompañamiento de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), lo que representa un valor agregado por la experiencia que tiene en otras naciones de la región”, enfatizó.
Refirió que el gran reto del Ministerio de Educación “es que los maestros puedan fortalecer sus conocimientos, sus estrategias pedagógicas y de los instrumentos didácticos, por eso enhorabuena que podamos aplicar este año la evaluación por desempeño, para una inversión de gran escala para la formación continua”.
El proceso de evaluación del desempeño docente, con la participación del Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE) y el acompañamiento de técnicos de la OEI, abarcará a más de 80 mil docentes, lo que ofrecerá un diagnóstico para la aplicación de los incentivos a partir de enero del próximo año, “es decir, por la mejora de la calidad de vida de los docentes, su formación continua y el desarrollo de la educación de manera integral”.
En la actividad con los directores de las 18 regionales y los 105 distritos educativos, también expuso el director del Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE), Leonardo Valeirón, quien afirmó que la evaluación docente será la cuarta experiencia en la historia de la educación nacional. Las tres anteriores se hicieron en 1993, 1999 y 2008.
Agregó que se delinearán dos etapas, una diagnóstica a nivel magisterial, y una segunda que tiene que ver con la distribución de los incentivos a maestros y maestras de las escuelas públicas del país, “con una clara voluntad dirigida a la construcción de un sistema científico y la validez necesaria para la formulación de planes de mejoras en los planteles escolares, los maestros, los estudiantes y el personal administrativo”.
El proceso, que cuenta con la asesoría del experto cubano Héctor Valdez Veloz, se basará en 86 indicadores extraídos de 188 aprobados por el Consejo Nacional de Educación, con una aplicación de lo que es posible en el sistema educativo, acompañado de 700 pares de observadores que durante 45 días estarán presentes en cuatro períodos diferentes de clases por día en las escuelas.
OEI destaca actuación RD
En una breve intervención, la encargada de la oficina de la OEI en el país, Catalina Andújar, destacó que “la República Dominicana no ha estado ajena al objetivo de este proceso vinculado a la aplicación de incentivos salariales, sino además al desarrollo profesional y a la carrera docente, tal como se ha establecido en el marco normativo dominicano”.
Enfatizó que el proceso permitirá establecer políticas educativas bien definidas, claras y claves para fortalecer la formación permanente y puntual en el desarrollo profesional de los docentes, “de ahí que a la OEI le corresponde todo el apoyo técnico necesario y el acompañamiento en los diferentes procesos del mismo”.
Especialista internacional
En tanto que el especialista Valdez Veloz, exdirector del Observatorio de Evaluación del Desempeño Docente de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), valoró que, en el proceso, acompañado de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), se esté apostando al desarrollo profesional docente, pagar salarios dignos, “y al mismo tiempo, detectar fortalezas y debilidades para seguir mejorando el sistema educativo dominicano”.
A la actividad asistieron, además, el viceministro Ramón Valerio; Enriquillo Matos, del Seguro Médico para Maestros (SEMMA); René Jáquez, del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE); Yuri Rodríguez, del Instituto Nacional de Bienestar Magisterial (INABIMA); Frank Cáceres, de Descentralización; Primitiva Medina, vicepresidenta de la ADP, entre otras personalidades y funcionarios vinculados a la educación.