REDACCIÓN INTERNACIONAL .-Los republicanos han conseguido revalidar su mayoría en la Cámara de Representantes de Estados Unidos tras las elecciones legislativas de la semana pasada, lo que les asegura el control completo del Congreso.
Con 218 escaños alcanzados, los republicanos obtienen así la mayoría en la Cámara de los Representantes, mientras que los demócratas suman 208, con nueve asientos aún por definir. Esta victoria se suma al liderazgo que los republicanos ya tienen en el Senado, lo que otorga al presidente electo, Donald Trump, un apoyo legislativo total.
El dominio republicano le permite a Donald Trump avanzar con su agenda política centrada en recortes de impuestos para empresas, trabajadores y jubilados. Entre sus prioridades, el futuro mandatario pretende extender los recortes fiscales de 2017, así como aumentar la financiación del muro fronterizo con México, y llevar a cabo reducciones de presupuesto en programas como el Departamento de Educación.
Sin embargo, los planes de Trump podrían aumentar significativamente la deuda nacional, que ya supera los 35 billones de dólares, mientras los costos de endeudamiento siguen creciendo. Esto podría desafiar su objetivo de reducir el déficit.