La policía de Londres ha elevado a 30 el número de fallecidos en el incendio que el miércoles pasado calcinó casi en su totalidad la torre Grenfell de la capital británica, según ha informado el comandante Stuart Cundy, de la Policía Metropolitana. Este ha añadido que otras 24 personas permanecen hospitalizadas, de las que 12 siguen muy graves. No obstante, solo seis cadáveres han sido recuperados del inmueble. El resto sigue en el edificio debido al riesgo que entraña para los equipos de rescate el estado del bloque. La policía ha manifestado su esperanza de que la cifra de muertos no supere el centenar.
Cundy ha insistido en que su absoluta prioridad es rescatar del edificio e identificar a las víctimas mortales del incendio, que hizo arder como una tea la torre. "Nos comprometemos a informar a las familias en cuanto sepamos más allá de toda duda que su ser amado es una de las personas identificadas", ha dicho. "Pero este es un proceso complejo" y "existe riesgo de que no podamos investigar a todas las víctimas", ha añadido.
El responsable policial ha afirmado que en este momento "no hay nada que sugiera que el fuego fuera intencionado". Cundy ha añadido que ya están identificados todos los heridos que han pasado por los hospitales. De momento, solo uno de los internados ha fallecido.
Los servicios de emergencia siguen buscando los cuerpos de todas aquellas personas que quedaron atrapadas en alguna de las 24 plantas de la torre, una vez perdida la esperanza de localizar a más supervivientes. La policía no ha precisado aún públicamente cuantas residentes en la torre permanecen en paradero desconocido. BBC asegura que 76 personas permanecen desaparecidas tras la tragedia. Oficialmente no se ha facilitado ningún nombre de fallecido o desaparecido.
La policía había asegurado este jueves que solo había podido sacar del edificio calcinado seis cadáveres, que han sido llevados a la morgue de Westminster. De momento los servicios de rescate están asegurando y apuntalando amplias zonas de lo que ya no es más que un esqueleto carbonizado, especialmente en las plantas superiores "donde será más difícil acceder y buscar a las víctimas", según han comunicado los bomberos.
Un día después de que la primera ministra británica, Theresa May, anunciara una investigación pública sobre el siniestro, la policía metropolitana ha confirmado que también este organismo abrirá la suya propia.
Mohamed Alhajali, un refugiado sirio de 23 años, es el primer nombre identificado de entre las víctimas mortales del incendio en la torre Grenfell de Londres, según BBC. “Mohamed emprendió un peligroso viaje para huir de la guerra y la muerte en Siria y acabó encontrándola aquí en el Reino Unido y en su propia casa”, reza el triste comunicado de la ONG que asistió a este joven a su arribada al país, en 2014. Alhajali, estudiante de ingeniería civil, residía con su hermano Omar en la planta 14 del inmueble, ubicado en el barrio de Notting Hill(North Kensigton), al oeste de la ciudad.
La organización Campaña de Solidaridad con Siria ha explicado, a partir del relato de Omar, que los dos hermanos intentaron escapar del piso cuando se declaró el incendio y que perdieron el contacto en el camino escaleras abajo. Omar fue rescatado por los bomberos (hoy permanece hospitalizado y su estado sigue mejorando), pero Mohamed regresó al apartamento para llamar a su familia en Siria. “Estuvo dos horas al teléfono hablando con un amigo de Siria y a la espera de ser rescatado”, ha revelado la ONG.
Mohamed, Omar y otro de sus hermanos tenían previsto participar este sábado en un acto de la organización para homenajear a la diputada Jo Cox, asesinada el año pasado por un enajenado en vísperas del referéndum que celebró el país sobre la permanencia en la Unión Europea en junio de 2016. La convocatoria del evento se mantiene en pie, aunque derivará en un tributo al joven refugiado sirio y a las restantes víctimas del espantoso incendio.
La segunda víctima identificada es Khadija Saye, de 24 años, quien se encontraba en el piso 20 en el momento en que se declaró el fuego. El diputado laborista David Lammy, del barrio londinense de Tottenham, colgó en su cuenta de Twitter un mensaje con el que trataba de recabar alguna información sobre Saye, una fotógrafa de 24 años que vivía en el inmueble y acababa de exponer su trabajo en la Bienal de Venecia. Ahora asegura que ha fallecido. No obstante, oficialmente no se ha divulgado nombre alguno.
La reina Isabel II de Inglaterra y el príncipe Guillermo han visitado este viernes el centro deportivo en el que permanecen refugiados y a cubierto varios de los vecinos del edificio Grenfell que pudieron ser rescatados por los bomberos prácticamente con lo puesto.