Santo Domingo. – La Unión de Medianos y Pequeños Industriales de la Harina (UMPIH), celebra 35 aniversario de fundación como modelo asociativo, asumiendo con firme propósito la mediación y resolución de alternativas para los empresarios de pequeñas y medianas empresas.
El pan en República Dominicana es un bien de consumo masivo. Pero no solo se trata de pan, sino que el sector procesador de harina de trigo se ha convertido en una pujante y dinámica industria, en donde confluyen miles de empresas, cientos de intermediarios, millones de consumidores, y un Estado que se nutre de los impuestos que se generan en todas las cadenas de valor que se han creado alrededor de dicha industria. A la par, el sector procesador de harina es un aportante fundamental del Producto Interno Bruto (PIB), lo mismo que un fuerte generador de empleos en el país.
¿Por qué nace UMPIH?
La inestabilidad en el abastecimiento de la harina en 1988, los precios, los volúmenes a ser vendidos y distintas condiciones relativas a las compras, fue lo que motivó a que un grupo de hombres y mujeres se unieran como respuesta a un problema común de las PYMES de la industria de la harina.
Tres décadas después, ya cuentan con una Cooperativa de Servicios Múltiples de los Procesadores de Harina, Inc. (COOPROHARINA), la que tiene un moderno molino en Santo Domingo y dos sucursales en Santiago y San Francisco.
Issachart Burgos, presidente del gremio dijo que, “Hoy hacemos una retrospectiva, vemos como hemos evolucionado junto a nuestros socios, los cuales suman mil doscientos en todo el territorio nacional, hemos logrado el objetivo de apoyarnos, defender a los miembros y, sobre todo, hemos logrado apoyar a los industriales de la harina para que sirvan con calidad uno de los alimentos que integran la canasta básica que consumen las familias dominicanas como es el pan”.
Burgos aseguró que el sector de la harina treinta cinco años después es otro, ha crecido, genera más de 20,000 mil empleos directos y más de 15,000 mil empleos indirectos. Que vive una época favorable, con importantes oportunidades de mercado y de apoyo Estatal y/o regulador. También, cuenta con las nuevas tecnologías de aliado y un mercado retador, que los hace crecer cada vez más.
“La unión de 1988, logro consolidar sus objetivos integrando a todos los que en sus unidades productivas se dedicaban al procesamiento de la harina de trigo o materias primas afines o a la comercialización de productos elaborados”, asegura Burgos.
El gremio empresarial que representa y defiende los intereses de los procesadores de la harina, es reconocida por ser un modelo de gestión en la oferta de servicios a sus asociados.
“En este aniversario número 35, queremos anunciar al país que desde el año pasado iniciamos la implementación del Plan Nacional para el Desarrollo de la Industria de la Harina en nuestro país, acompañados de Cooproharina”, anunció el presidente del gremio.
La organización líder de la industria asegura tener un compromiso de continuar aportando y apoyando el fortalecimiento de las industrias, siendo dos instituciones con un solo objetivo, integrar y representar a los industriales de la harina de la República Dominicana.
Futuro de la industria panificadora
“Sin duda, el sector tiene restos, como todos, sin embargo, podemos resaltar la competitividad de las PYMES industriales, la productividad, la creación de nuevos mecanismos para mantener estables los precios de los principales insumos y redefinir políticas públicas. La innovación y la transformación productiva de las empresas del sector con el objetivo de recuperar los niveles de rentabilidad que se tenían al año 2019”, detalló el presidente de UMPHI, Issachart Burgos.