Este jueves es día feriado en la República Dominicana por la celebración de Corpus Christi.
Esta es la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, de la presencia de Jesucristo en la Eucaristía y la conmemora la feligresía católica.
Este día recordamos la institución de la Eucaristía que se llevó a cabo el Jueves Santo durante la Última Cena, al convertir Jesús el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre.
Es una fiesta muy importante porque la Eucaristía es el regalo más grande que Dios nos ha hecho, movido por su querer quedarse con nosotros después de la Ascensión.
El padre Manuel Antonio García Salcedo, explica que la fiesta de Corpus Christi en República Dominicana ha venido a constituirse en una unidad con la misma cultura de esta nación.
Destacó que “gracias a Dios en nuestro país se mantiene esta costumbre, porque en otros países ha sucumbido ante la presión social, ante los grupos no cristianos o no confesionales y han trasladado la fiesta de Corpus Christi para el domingo, día del Señor, y aunque tiene igual validez esta fiesta, celebrada en jueves, es una gran profundización en la fe cristiana”.
Indicó que en esta celebración se recuerda el Jueves Santo, día en que el mismo Jesús instituyó el sacramento de la Eucaristía. A través de esta celebración se proclama y aumenta la fe de la Iglesia Católica, cimentada en Jesucristo presente en el Santísimo Sacramento”.
En ese sentido, el Catecismo de la Iglesia Católica (CIC), define la Eucaristía como el centro de la vida cristiana. “La Eucaristía es fuente y culmen de toda la vida cristiana” (CIC 1324).
La Iglesia enseña, también, que “Jesucristo está presente en la Eucaristía de modo único e incomparable. Está presente, en efecto, de modo verdadero, real y sustancial: con su Cuerpo y con su Sangre, con su alma y su divinidad. Cristo, todo entero, Dios y hombre, está presente en ella de manera sacramental, es decir, bajo las especies eucarísticas del pan y del vino”.
En República Dominicana, al igual que en otros países, la hostia consagrada se lleva procesionalmente por las calles con cantos, luces oraciones y alabanzas, con una asistencia masiva, rindiendo así homenaje a Cristo, presente en el sacramento. La exhibición de la hostia se hace mediante las custodias. Esta procesión se realiza antes de la misa, donde la feligresía da testimonio de su fe ferviente.
Es importante destacar que un día como hoy algunas parroquias aprovechan para celebrar la primera comunión de los niños, por ser un día especial.