SANTO DOMINGO.- El empresario Guillermo Julián Jiménez consideró que la institución del orden debe poner su mayor empeño en la profesionalización de sus agentes que por mandato constitucional están facultados para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.
Al girar una visita a la sede de la institución, en atención a una invitación que le hiciera el director general de la Policía Nacional y el Comisionado Ejecutivo para la Reforma, el joven empresario dijo conoció de los procesos que viene desarrollando la uniformada en procura de lograr la profesionalización de los más de 37 mil miembros de la Policía Nacional.
"Ahora con el proceso de la reforma uno de los puntos más crítico y fundamentales a mi juicio es el tema de la formación de los agentes que tienen que pasar por la academia, que tienen que durar por lo menos un año, antes duraban hasta tres meses y luego lo hacían policía y salían a patrullar sin ningún tipo de formación", apuntó.
Jiménez valoró el trabajo que está desarrollando la uniformada para logar la reforma policial como lo anunciara el Gobierno, cuya finalidad es lograr que el cuerpo del orden se convierta en parte de la solución y no así del problema como ocurría en el pasado.
"Se están implementando una serie de medidas, por ejemplo la Policía Nacional tenía 87 años y nunca se le había hecho una auditoría, se le está pasando revista a los temas pendientes", aseveró.
Guillermo Julián, quien es abogado de profesión, lamentó que las acciones delictivas mantengan en constante zozobra a la población que se siente presa de los antisociales, situación que se refleja a diario a través de los medios de comunicación tradicionales y de las redes sociales.
"Ciertamente la pandemia produjo un rebote de la delincuencia en términos estadísticos. La Policía Nacional junto con el comisionado de la reforma ha establecido un proceso de reforma", afirmó Jiménez.
El ejecutivo empresarial manifestó que la Policía Nacional está dando pasos "certeros" en dirección a erradicar la delincuencia en beneficio de los dominicanos que “anhelan y merecen vivir en un país seguro”.