REDACCIÓN INTERNACIONAL .-El régimen de China intensificó su censura tras el atropello masivo en la ciudad de Zhuhai, que dejó al menos 35 muertos y decenas de heridos. La tragedia ocurrió el lunes por la noche cuando un hombre identificado como Fan, de 62 años, embistió con su vehículo a un grupo de personas que ejercitaban alrededor de un centro deportivo.
Aunque las imágenes y videos del incidente se difundieron rápidamente en redes sociales, las autoridades eliminaron este contenido pocas horas después. Además, la policía local informó solo de “heridos”, omitiendo las muertes hasta casi 24 horas después, cuando el recuento de víctimas finalmente se hizo público.
China mantiene una estricta vigilancia sobre las redes sociales, donde la censura de temas sensibles es inmediata y, en ocasiones, toma solo minutos. En Weibo, una plataforma similar a X, las publicaciones con videos y fotos de la escena sangrienta fueron eliminadas rápidamente. Otro contenido similar en Xiaohongshu, la versión china de Instagram, también desapareció sin explicaciones.