REDACCIÓN.-Durante una audiencia celebrada este jueves Tyler Robinson, el joven de 22 años acusado de asesinar al activista conservador Charlie Kirk en el campus de la Universidad del Valle de Utah en Orem, compareció por primera vez en persona ante el tribunal, vestido con camisa, corbata y pantalón de vestir, y con grilletes en muñecas y tobillos.
Robinson saludó a sus familiares, quienes se encontraban en la primera fila; su madre se mostró visiblemente conmocionada, secándose las lágrimas con un pañuelo, acompañada por el padre y el hermano del acusado. Hasta ese momento, Robinson solo había participado en las audiencias mediante videollamada o audio desde la cárcel.
El juez Tony Graf de Utah anunció que evalúa restringir aún más el acceso de los medios de comunicación al proceso judicial contra Tyler Robinson.
La defensa de Robinson y la Oficina del Sheriff del condado de Utah han solicitado la prohibición total de cámaras en la sala, argumentando que la intensa cobertura mediática podría afectar el derecho del acusado a un juicio justo.
El juez Graf ya había adoptado medidas para proteger la presunción de inocencia de Robinson, reconociendo que el caso ha generado una atención pública “extraordinaria”. En una audiencia a puerta cerrada el 24 de octubre, los abogados debatieron sobre la vestimenta y los protocolos de seguridad del acusado.




