REDACCIÓN.- El 23 de julio de 1986 la Comisión Ballenera Internacional (CBI) decidió proclamar ese día como el Día Mundial Contra la Caza de Ballenas, hoy conocido como Día Mundial de las Ballenas y los Delfines. El propósito de esta fecha es frenar la caza indiscriminada y tortuosa de esos animales.
Las ballenas son los animales más grandes que jamás hayan existido. Pertenecen a un grupo de mamíferos marinos conocidos como cetáceos. No son peces porque tienen sangre caliente, respiran aire a través de pulmones y dan a luz a crías vivas que se alimentan de leche materna.
Tienen un oído excelente y son dos o tres veces más eficientes que los mamíferos terrestres para utilizar el oxígeno del aire que respiran. Las ballenas tienen cajas torácicas colapsables que las ayudan cuando se sumergen a profundidad. Además, poseen una capa de grasa muy gruesa que las aísla para protegerlas del frío.
Los científicos creen que las ballenas evolucionaron de mamíferos terrestres de cuatro patas. Ahora, están perfectamente adaptadas a una vida submarina. Tienen un cuerpo aerodinámico y han perdido casi todo el pelo externo para evitar la fricción y mejorar el deslizamiento por el agua. Sus extremidades se transformaron en aletas.
El 23 de julio de 1986 la Comisión Ballenera Internacional (CBI) decidió proclamar ese día como el Día Mundial Contra la Caza de Ballenas, hoy conocido como Día Mundial de las Ballenas y los Delfines. El propósito de esta fecha es frenar la caza indiscriminada y tortuosa de esos animales.
Las ballenas son los animales más grandes que jamás hayan existido. Pertenecen a un grupo de mamíferos marinos conocidos como cetáceos. No son peces porque tienen sangre caliente, respiran aire a través de pulmones y dan a luz a crías vivas que se alimentan de leche materna.
Tienen un oído excelente y son dos o tres veces más eficientes que los mamíferos terrestres para utilizar el oxígeno del aire que respiran. Las ballenas tienen cajas torácicas colapsables que las ayudan cuando se sumergen a profundidad. Además, poseen una capa de grasa muy gruesa que las aísla para protegerlas del frío.
Los científicos creen que las ballenas evolucionaron de mamíferos terrestres de cuatro patas. Ahora, están perfectamente adaptadas a una vida submarina. Tienen un cuerpo aerodinámico y han perdido casi todo el pelo externo para evitar la fricción y mejorar el deslizamiento por el agua. Sus extremidades se transformaron en aletas.