ESTADOS UNIDOS.- La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que New York Helicopter Tours cesará de manera inmediata todas sus operaciones. Esta medida es parte de las acciones tomadas tras el accidente aéreo ocurrido en la ciudad que resultó en la muerte del piloto y de una familia compuesta por cinco turistas españoles.
La FAA también señaló a través de una declaración publicada en X (anteriormente Twitter) que lanzará una revisión inmediata del historial de seguridad y la licencia operativa de la empresa de tours. Este anuncio se produjo tras el reciente accidente en el que un helicóptero turístico de la compañía se desintegró en pleno vuelo y se estrelló en Nueva York.
El piloto, quien también perdió la vida, fue identificado como Seankese Johnson, tenía 36 años y era un veterano de los Navy SEAL de la Marina de los Estados Unidos. Johnson había obtenido su licencia de piloto comercial en 2023.
El accidente ocurrió mientras el helicóptero realizaba un vuelo turístico sobre la ciudad, una actividad popular entre los visitantes por las vistas panorámicas de lugares emblemáticos como la Estatua de la Libertad y el World Trade Center. Sin embargo, el impacto de este tipo de tragedias ha generado un debate recurrente sobre la seguridad de estas operaciones.
El accidente del jueves no es un caso aislado. En las últimas dos décadas, al menos cinco helicópteros turísticos han caído en los ríos Hudson y East debido a fallas mecánicas, errores humanos o colisiones, dejando un saldo de 20 personas fallecidas.
Este historial ha llevado a críticos de la industria a exigir mayores restricciones o incluso la prohibición total de los vuelos turísticos no esenciales sobre la ciudad.
En 2016, la ciudad de Nueva York limitó a 30.000 el número de vuelos turísticos que podían despegar anualmente desde los helipuertos de Manhattan. Sin embargo, muchas empresas trasladaron sus operaciones a Nueva Jersey para eludir estas restricciones.
A pesar de estas medidas, los accidentes han continuado. En 2018, cinco personas murieron cuando un helicóptero con “puertas abiertas” cayó al río East después de que el cordón de sujeción de un pasajero activara accidentalmente un interruptor de combustible.
En una conferencia de prensa realizada el domingo, antes del anuncio de la FAA, el senador Chuck Schumer pidió que se suspendieran todos los vuelos de New York Helicopter Tours mientras la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) investiga las causas del accidente.
Schumer también instó a la FAA a intensificar las inspecciones de seguridad en todas las compañías de tours en helicóptero, señalando que estas empresas tienen un “historial de muertes” y acusándolas de tomar atajos en materia de seguridad.
“Una de las cosas que podemos hacer para honrar esas vidas y tratar de salvar otras es asegurarnos de que no vuelva a suceder”, declaró Schumer.
Por su parte, el presidente de New York Helicopter Tours, Michael Roth, no respondió a las solicitudes de comentarios realizadas por el medio. Sin embargo, la compañía emitió un comunicado en su sitio web asegurando que está colaborando con las autoridades en la investigación.
Mientras que críticos de la industria exigen mayores restricciones, el Consejo de Helicópteros de la Región Oriental, un grupo industrial, defendió las operaciones actuales. Según el consejo, los helicópteros turísticos de Manhattan ya operan bajo “las regulaciones más estrictas”.
En un comunicado, el grupo expresó su disposición a trabajar con los líderes para garantizar tanto la seguridad como la preservación de las empresas y la comunidad de la aviación.
A pesar de estas afirmaciones, los críticos insisten en que las medidas actuales no son suficientes para prevenir tragedias como la ocurrida el jueves. Los buzos de rescate continúan buscando el rotor principal y la caja de engranajes del helicóptero, componentes clave que podrían arrojar luz sobre las causas del accidente.