REDACCIÓN.- En personas que alcanzan edades avanzadas con buena salud, la longevidad suele estar vinculada a estilos de vida equilibrados y patrones alimenticios específicos.
Según un reporte de Mindfood, uno de los elementos comunes en la dieta de muchos individuos longevos es el romero, una hierba valorada tanto por sus usos culinarios como por sus propiedades medicinales. Una investigación del Departamento de Biología y Biotecnología de la Universidad de Pavía, publicada en la revista Plants, sugiere que su consumo habitual podría contribuir a una vida más larga y saludable.
La información destaca que el romero no solo es un símbolo de memoria y vitalidad, sino que la ciencia moderna comienza a confirmar su potencial para promover la longevidad y la salud cerebral.
El romero se estaca por su riqueza en compuestos naturales con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Mindfood detalla que entre los principales componentes se encuentran el ácido carnósico y el ácido rosmarínico. Estos antioxidantes ayudan a combatir el estrés oxidativo, un proceso que contribuye al envejecimiento celular y al desarrollo de enfermedades crónicas.
Además, las propiedades antiinflamatorias del romero pueden reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y artritis, dos afecciones que suelen incrementarse con la edad.
La información publicada por Mindfood subraya que estos efectos no se limitan a la prevención de enfermedades, sino que también pueden influir en la calidad de vida general, al contribuir a mantener la vitalidad y la funcionalidad física en la vejez.
Más allá de sus efectos sobre la longevidad física, el romero ha sido tradicionalmente reconocido como la “hierba del recuerdo”. El folclore lo asocia con la memoria y la claridad mental, y la ciencia comienza a respaldar estas creencias ancestrales.
Según Mindfood, la inclusión del romero en la dieta y la inhalación de sus aceites esenciales pueden mejorar la función cognitiva y retrasar la progresión del deterioro cerebral relacionado con la edad. Según la publicación “estudios sugieren que inhalar los aceites esenciales de romero o incluirlo en la dieta podría mejorar la función cognitiva y retrasar la progresión del deterioro cerebral relacionado con la edad”.
Esta afirmación se apoya en investigaciones que exploran cómo los compuestos del romero interactúan con los neurotransmisores y la circulación cerebral, favoreciendo la memoria y la concentración.
El uso del aceite esencial de romero, difundido en el hogar, también se ha vinculado a mejoras en el estado de ánimo y la memoria, según detalla Mindfood.
Aunque el romero suele ser seguro para la mayoría de las personas, el medio advierte sobre la importancia de un consumo moderado. Señala que “las dosis muy altas pueden causar efectos secundarios”, por lo que recomienda utilizarlo siempre con moderación.
Además, quienes padecen alguna enfermedad o se encuentran embarazadas deben consultar a un profesional de la salud antes de incorporar el romero de manera regular en su dieta. La advertencia publicada por Mindfood subraya que, si bien los beneficios potenciales del romero son prometedores, no se deben considerar como propiedades curativas definitivas.
La recomendación de consultar a un especialista cobra especial relevancia en personas con condiciones médicas preexistentes o que estén bajo tratamiento farmacológico, ya que el romero podría interactuar con ciertos medicamentos o agravar algunas patologías. Esta precaución busca asegurar que el uso del romero se realice de manera segura y adaptada a las necesidades individuales.
La información proporcionada por Mindfood invita a explorar los posibles beneficios del romero dentro de un enfoque equilibrado y responsable, integrándolo en la dieta y el estilo de vida como parte de una estrategia más amplia de promoción de la salud y el bienestar.
