Santo Domingo.- El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), propone invertir en una “Campaña de Amor a la Vida” en la que se promueva el verdadero sentido que ella tiene, ante tantos casos horripilantes que sacuden nuestra sociedad y que se convierten en viral y tendencia.
Su representante, el Pastor Feliciano Lacen dice que le preocupa el nivel de sensibilidad que los dominicanos estamos teniendo. Se presenta un caso y de momento otro más fuerte lo saca del tapete. De igual manera solo se hace eco cuando la víctima es reconocida.
Para el pastor Feliciano Lacen, la vida de un ser humano tiene un valor que todavía en el mundo no existe riqueza con la que se pueda comprar. “Creo que estos últimos casos deben llevar a la autoridades y familia a una profunda reflexión, porque de no hacerlo estamos condenados al fracaso colectivo, o el síndrome de Adán buscando un culpable. Todos tenemos que aportar una cuota de responsabilidad, tanto la familia, los actores sociales y el Estado”, observó.
El uso de bebidas, las sustancias prohibidas y estupefacientes; y aun la música que se está consumiendo denigran el valor de la vida, lo cual lleva al ser humano a convertirse en un monstruo, al querer vivir bajo una burbuja de “bienestar temporal”. Aquí debe entrar el Estado para regular y castigar aquellos que pierden el control y quitan la paz social.
“No podemos continuar tomando casos reactivos para activar políticas, ni sectorizar, como si solo un sector determinado tiene la solución. Esto sólo tendrá salida si existe el compromiso de un pacto social no político, para que los diferentes actores, políticos, empresarios y sociales, podamos trabajar juntos, para y con la familia, y los medios de comunicación son un poder imprescindible para esta nueva transición social en valores”, estimó.
“La iglesia debe seguir con la parte espiritual, pero a esto debemos agregar salir de las cuatro paredes, para seguir transformando familias, barrios, provincias y nuestra nación. De continuar esperando una solución unilateral podríamos enfrentarnos a penosas sorpresas”, afirmó.