WASHINGTON— El presidente, Joe Biden, hizo oficial este martes que se postula para la reelección en 2024, culminando meses de especulaciones sobre sus planes cuatro años después de que anunciara su campaña para 2020.
En un video titulado Libertad, que comienza con una escena del ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021, seguida de una imagen de una protesta por el derecho al aborto, Biden dijo que después de pasar su primer mandato luchando por la democracia del país, "los extremistas de MAGA se están alineando" para recortar la red de seguridad social y quitar a los ciudadanos sus libertades personales.
“Recortar el Seguro Social que has pagado durante toda tu vida mientras se le reducen los impuestos a los muy ricos. Dictar qué decisiones de atención médica pueden tomar las mujeres, prohibir los libros y decirle a la gente a quién pueden amar. Todo mientras te hace más difícil poder votar”, manifestó.
“Cuando me presenté a la presidencia hace cuatro años, dije que estábamos en una batalla por el alma de Estados Unidos. Y todavía lo estamos. La cuestión a la que nos enfrentamos es si en los próximos años tendremos más o menos libertad. Más derechos o menos”, indicó, añadiendo: “No es momento de dormirse en los laureles. Por eso me presento a la reelección".
El anuncio de su candidatura es un esfuerzo por posicionar a Biden como la mejor esperanza del país para derrotar a un oponente republicano y cimentar los éxitos de su Administración de cara a 2024.
La simetría del cuarto aniversario constituye una apertura adecuada para un presidente que se ha apoyado en la historia en momentos clave para presentar su visión a los estadounidenses sobre el camino que queda por recorrer.
Biden lanzó su campaña en 2019 también con un video, advirtiendo que otros cuatro años con Trump “alterarían para siempre y fundamentalmente el carácter de esta nación, lo que somos”, y destacando la violencia de 2017 en un mitin nacionalista blanco en Charlottesville, Virginia. El video publicado este martes no menciona a Trump por su nombre, aunque deja entender el espectro de una revancha -y un reconocimiento de las fuerzas del trumpismo-. Aparece una imagen de la congresista republicana Marjorie Taylor Greene, una de las más firmes defensoras de Trump, y una foto del exmandatario junto al gobernador de Florida, Ron DeSantis, considerado uno de sus principales rivales para la nominación republicana