Austria ha vetado la entrada en su territorio al ministro de economía turco, Nihat Zeybecki, que pretendía participar en una manifestación con motivo del aniversario del intento de golpe de estado del año pasado en Turquía, según el portavoz de la cancillería, Thomas Schnoell.
"Se le prohibió la entrada porque su visita no fue planeada como parte de un intercambio bilateral, sino para su aparición pública en un acto de conmemoración del intento de golpe", informó Schnoell, que justificó la prohibición considerando que la presencia de Zeybekci representaría un "peligro para el orden público".
Esta medida está en sintonía con la decisión de Holanda de prohibir el viernes pasado la presencia del viceprimer ministro turco, Tugrul Turkus, en una ceremonia entre turcos expatriados para conmemorar el aniversario del golpe.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se quejó también la semana pasada de que no se le permitió hablar a los turcos en Alemania, en el marco de su visita al país durante el encuentro del G-20 en Hamburgo. En una extraña entrevista concedida al semanario alemán Die Zeit, declaró que Alemania "se estaba suicidando" al tomar esa decisión.
Austria ha sido una de las voces más críticas dentro de la UE con la deriva autoritaria que está viviendo Turquía tras el fallido intento de golpe de estado de julio del año pasado, que se saldó con la muerte de 240 personas. Desde Viena han llamado a la suspensión de las conversaciones de acceso de Turquía a la UE en repetidas ocasiones.
Desde el pasado año, Turquía ha encarcelado a más de 50.000 personas y despedido a alrededor de 150.000, entre los que se incluyen soldados, profesores y funcionarios, por supuestos lazos con Fethullah Gülen, el clérigo musulmán en el exilio al que Ankara culpa del golpe.
No es la primera vez que Turquía tiene problemas de este tipo con naciones europeas. En marzo del año pasado, varios países con importantes poblaciones turcas, entre las que se incluyen Holanda y Austria, bloquearon mitines pro-Erdogan en la víspera del referendum del 16 de abril que dotó al presidente de un "poder absoluto".
Unos 360.000 personas de origen turco viven en Austria, entre ellas 117.000 con ciudadanía de ese país. Muchos de ellos son partidarios de Erdogan que votaron "sí" en el referéndum.