BANDUNG, Indonesia (AP) — Un militante musulmán y fabricante de bombas convicto que salió de prisión el año pasado se inmoló el miércoles en una estación de policía en la isla de Java, la principal de Indonesia, matando a un oficial e hiriendo a 11 personas, dijeron las autoridades.
El atacante ingresó a la estación de policía de Astana Anyar con una motocicleta y detonó una de las dos bombas que llevaba mientras la policía hacía fila para una asamblea matutina, dijo el jefe de policía de la ciudad de Bandung, Aswin Sipayung. El otro explosivo fue desactivado.
Un video que circuló en las redes sociales mostraba partes de cuerpos cerca del vestíbulo dañado de la comisaría, que estaba envuelto en humo blanco mientras la gente salía corriendo del edificio.
El vendedor de alimentos Herdi Hardiansyah dijo que estaba preparando comidas detrás de la estación cuando un fuerte estruendo lo sorprendió.
Vio a un oficial de policía a quien reconoció como uno de sus clientes cubierto de sangre, mientras otros dos oficiales lo llevaban en una motocicleta a un hospital. Más tarde supo que el oficial había muerto. Otros diez y un civil resultaron heridos.