HONDURAS.-A medida que pasaban las horas y que el Consejo Nacional Electoral (CNE) en Honduras seguía sin divulgar el total del escrutinio de la elección presidencial del domingo, crecía la incertidumbre entre los electores.
Dos días después de los comicios, todavía no había un resultado claro en los comicios presidenciales, dilatado por el mecanismo del ente electoral para contabilizar las actas de la votación.
El último corte de resultados se emitió el lunes al mediodía y luego la consejera presidenta del CNE, Ana Paola Hall, anunció el cierre del Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP). La institución tiene un plazo de 30 días para contabilizar los datos definitivos.
El último resultado divulgado por el CNE mostraba que, con el 57.03% de las actas contabilizadas, dos candidatos opositores, los conservadores Nasry Asfura y Salvador Nasralla, mantenían un empate técnico.
Asfura, de Partido Liberal, presentaba 749.022 votos (39.91%), lo que representa una ligera ventaja de 515 votos sobre Nasralla, del Partido Liberal, que obtenía 748.507 votos (39.89%). En tercer lugar aparecía la candidata oficialista del partido de izquierda Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, quien obtenía 359.584 votos, lo que representa apenas el 19.16%.
Los candidatos a la cabeza de la votación exigieron por separado al CNE que no siga reteniendo los resultados. “Hay un 47 por ciento (de las actas) que no han ingresado”, dijo Nasralla, que atribuyó a un problema técnico el retraso en la actualización.
Sin embargo, dijo que él tenía en su poder las actas que demuestran su triunfo sobre el candidato nacionalista. De su lado, Asfura también aseguró tener las actas que lo dan como ganador, pero llamó a sus seguidores a esperar.
“Tengamos calma, los datos van a salir… y cuando salgan van a ser iguales a los que nosotros manejamos”, dijo Asfura, conocido como Papi a la Orden.
El conteo a cuentagotas también ha comenzado a generar suspicacia y a revivir el miedo que generan los fantasmas del pasado.




