ESTADOS UNIDOS.-El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó este miércoles la incursión de al menos 19 drones rusos en espacio aéreo polaco, que fueron derribados por las fuerzas de varios países europeos bajo la coordinación de la OTAN.
“¿Qué es esto de Rusia violando el espacio aéreo de Polonia con drones? ¡Allá vamos otra vez!“, escribió el mandatario republicano en su plataforma Truth Social.
La frase de Trump en redes sociales precedió al anuncio de la Casa Blanca de que el mandatario estadounidense sostendrá conversaciones este miércoles con el presidente polaco Karol Nawrocki, tras el incidente que marca un punto de inflexión en la guerra de Ucrania.
“El presidente Trump y la Casa Blanca están siguiendo los informes provenientes de Polonia, y hay planes para que el presidente Trump hable hoy con el presidente Nawrocki”, declaró a la AFP un funcionario de la Casa Blanca bajo condición de anonimato..
El episodio representa el primer caso en que un país miembro de la OTAN intenta derribar proyectiles rusos que ingresan a su territorio, después de que Polonia derribara al menos tres drones durante un ataque masivo ruso contra Ucrania. El espacio aéreo polaco fue violado 19 veces, según informó el primer ministro Donald Tusk.
La exclamación “¡Allá vamos!” en el mensaje de Trump sugiere una percepción de que el conflicto podría estar entrando en una nueva fase más peligrosa, coincidiendo con la evaluación del primer ministro polaco, quien describió la situación como la más cercana a un “conflicto abierto” desde la Segunda Guerra Mundial.
Tusk invocó el Artículo 4 de la OTAN, permitiendo consultas urgentes cuando un miembro considera amenazada su seguridad territorial. Esta medida, utilizada solo ocho veces en la historia de la alianza, subraya la gravedad del incidente.
Los drones causaron daños materiales en Wyryki-Wola, una aldea del este de Polonia, donde una casa quedó con el techo destrozado.
El ministro de Relaciones Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, calificó la intrusión como “no accidental” y la describió como “un caso sin precedentes de ataque no solo contra el territorio de Polonia, sino también contra el territorio de la OTAN y la Unión Europea”.
Rusia rechazó las acusaciones. Su Ministerio de Defensa negó haber atacado intencionalmente a Polonia, mientras que la cancillería rusa acusó a Varsovia de difundir “mitos” para escalar la guerra. La embajada rusa en Varsovia declaró que “Polonia no ha logrado proporcionar evidencia del origen ruso de los objetos que ingresaron al espacio aéreo polaco”.
El Consejo del Atlántico Norte modificó su reunión semanal para celebrarla bajo el Artículo 4, mientras que el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, elogió la “reacción muy exitosa” de la organización y denunció el “comportamiento imprudente” de Moscú.
El incidente ocurre días antes de los ejercicios militares Zapad-2025 programados del 12 al 16 de septiembre en Rusia y Bielorrusia, llevando a Tusk a describir los próximos días como “críticos” para Polonia, que alberga más de un millón de refugiados ucranianos.