SANTO DOMINGO.- El dirigente sindical y secretario general de la Federación Nacional de Trabajadores del Transporte Social Cristianos (FENATTRANSC), Mario Díaz, denunció hoy que “no existe una sola parada de motoconchos en el país que no esté siendo invadida o controlada por nacionales haitianos indocumentados”, señalando que este fenómeno representa una grave amenaza para la seguridad ciudadana y el orden público, generando un aumento significativo en los actos delictivos, como robos, vandalismo y agresiones sexuales, afectando gravemente la integridad de los usuarios del transporte público de pasajeros.
Según sus declaraciones, en provincias como Santo Domingo, el Distrito Nacional, Santiago y otras zonas urbanas importantes, “miles de haitianos se han apropiado de rutas de transporte de pasajeros, desplazando a los trabajadores dominicanos del sector e instalando un sistema paralelo sin regulación ni control”.
Mario Díaz denunció también la irresponsabilidad de las empresas y personas que comercializan motocicletas sin exigir documentación legal, así como de las entidades reguladoras que, según dijo, han permitido que personas sin estatus legal puedan operar como motoconchistas, comprometiendo la seguridad vial y ciudadana.
En este sentido, el secretario general de FENATTRANSC informó que su organización ha enviado una solicitud oficial a la Dirección General de Migración, a la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) y al Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) para que ejecuten operativos conjuntos en todo el país con el objetivo de que sean identificados y retirados de las rutas de transporte a los ciudadanos indocumentados, para restituir el control de las paradas a los trabajadores dominicanos debidamente acreditados.
“Estamos ante un problema de seguridad nacional, las rutas del transporte público no pueden estar manipuladas ni controladas por personas que han ingresado de manera irregular al país, es hora de actuar con firmeza para proteger la soberanía nacional, el empleo local y la seguridad de los pasajeros”, afirmó Díaz.
Diaz hizo un llamado urgente al gobierno para que atienda esta situación con la seriedad y celeridad que amerita, “el pueblo dominicano exige respuestas, no podemos seguir observando pasivamente cómo se desmantela nuestro sistema de transporte bajo la indiferencia de las autoridades”.