REDACCIÓN INTERNACIONAL .-El presidente de Bolivia cambió sorpresivamente a todo el mando policial en una jornada de conflictos con los seguidores de Evo Morales, que el lunes instalaron piquetes en defensa de su líder político, ante la inminente emisión de una orden de captura.
Ayer, en un acto en Casa Gran del Pueblo de La Paz, el presidente Luis Arce posesionó al general Augusto Juan Russo Sandoval como nuevo comandante general de la Policía Boliviana y tomó juramento a otras veinte autoridades regionales y a comandantes de las diferentes fuerzas policiales, quienes ocuparan funciones de manera interina.
El cambio en la Policía coincide con el inicio de bloqueos de un ala del Movimiento Al Socialismo (MAS) que respalda a Evo Morales, quien corre el riesgo de ser aprehendido y enviado a prisión por no haberse presentado a declarar ante la Fiscalía en una investigación que lo acusa por los delitos trata y estupro, por presuntamente haber embarazado a una adolescente cuando era presidente.
Según información oficial, el lunes se habían instalado cuatro puntos de bloqueo en carreteras que vinculan al departamento de Cochabamba con el resto del país y la medida se fue masificando. En la madrugada del martes, hubo un enfrentamiento entre mineros y efectivos de la Policía en la localidad de Parotani (al sudoeste de Cochabamba), que terminó en gasificación y dinamitazos.