SANTO DOMINGO. -Desigualdades sociales, inseguridad ciudadana, alto costo de la vida y desempleo son los principales problemas que vive la sociedad dominicana hoy en día, así lo considero el Diacono Permanente Blas Bonilla Morfe, durante el Sermón de la siete palabras
Al citar la sexta palabra “Todo está consumado” Bonilla Morfe dijo que estas son realidades difíciles por los que atraviesa día a día el país y que hacen a los ciudadanos sentirse impotentes. Sin embargo, llamó a la sociedad a no perder las esperanzas en que las cosas pueden mejorar y a orar por dichas realidades.
En la primera prédica del Sermón de las Siete Palabras, el padre Keiter de Jesús Luciano Alcántara pidió a Jesucristo que nos perdone por los políticos corruptos que han abandonado la sociedad.
«Perdón por los de posiciones de poder miran al prójimo como peones en una mesa de ajedrez, los cuales están dispuestos a sacrificar por sus propios intereses».
Pidió perdón por los que buscan resolver problemas y situaciones desde las plataformas digitales con «expresiones desencarnadas de la realidad» olvidando la cercanía y el encuentro con Jesús, «en definitiva, por lo que han olvidado la razón de ser de su misión y servicios».
Luciano Alcántara, quien leyó la primera palabra “Padre, Perdónalos porque no saben lo que hacen (Lc 23,34)”, añadió que, «la suplica de Jesús va dirigida hoy hacia todos aquellos que olvidándose de su identidad matan, oprimen e instrumentalizan al hermano, crucificándolo para sus propósitos, hoy frente al drama de la indiferencia en todos los aspectos… hemos de volver a levantar la voz, para pedir perdón al padre, perdón por los que en lugar de crear puentes, levantan muros porque se han olvidado de la fraternidad».
También que «el papa Francisco en abril de 2022 posteo en sus redes sociales de «x» que mas que ignorancia es falta de compresión, quien esta inmerso en la violencia y de sí mismo ya no sabe nada de dios ni de que es padre ni que lo demás somos hermanos».
Además dijo que, «se nos olvida nuestra identidad, la razón de ser, por qué y para qué estamos en este mundo, esa es la consecuencia del pecado, no solo del pecado personal, sino aun mas grave del pecado social, olvidarnos del otro y vivir sometidos a la dictadura del yo de la cual nos volvemos esclavos».