SANTO DOMINGO.- La mujer que pagó al francés Georges Antoine Thevenet para la fumigación en un apartamento en el piso 9 de la torre Da Silva 3, ubicada en el sector Piantini, lo abandonó por un periodo de 48 horas para evitar ser intoxicada con el producto que se utilizó, pero que afectó a sus vecinos, una familia que ha perdido a dos miembros por los efectos del plaguicida.
Según el abogado José Alexander Suero, quien dijo representar a la propietaria del inmueble, Karina Bausan, esta "no contrató" a Thevenet, sino su inquilina, cuyo nombre no reveló.
Suero sostuvo que "para la realización de ese proceso de fumigación el señor George coordinó con la inquilina que la misma tenía que abandonar el apartamento por lo menos 48 horas y así lo hizo". La inquilina se fue a Samaná hasta tanto se eliminaran los insectos, según dijo.
Sostuvo que Thevenet ya "había realizado en otras ocasiones procesos similares" en el apartamento "para la eliminación de insectos".
El togado afirmó que las fumigaciones no las hace la administración del condominio, sino que "cada dueño en la medida que lo entienda necesario".
Agregó que en los anteriores trabajos se realizaron para desinfectar los muebles y no para una "escultura per se".
Suero dijo que la señora Karina Bausan ha estado colaborando con las autoridades para responder a las informaciones que "han requerido para poder determinar qué fue lo que realmente detonó esta tragedia".
Por la fumigación, que se hizo el pasado viernes, falleció Adelle Ruiz de León y su bebé de dos meses, ambos intoxicados.
José Luis Acra, esposo de Adelle, y otro hijo menor de edad de un año y tres meses, se encuentran en condiciones delicadas de salud.
Las autoridades han ofrecido escasa información sobre el caso, alegando que darán los detalles según profundicen las pesquisas.