REDACCIÓN INTERNACIONAL.- La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), anunció suspensión indefinida de todas las actividades en su centro de urgencias de Turgeau, en Puerto Príncipe, tras el ataque a una de sus ambulancias por un grupo de hombres armados el pasado martes en la capital, en medio de la grave crisis y la violencia que vive el país caribeño.
»Obligaron a salir a un paciente y lo mataron», explica una nota en la que la institución anuncia la suspensión, con el fin de permitir un análisis del ataque y una reevaluación del riesgo para su personal y sus pacientes.
»Obligaron a salir a un paciente y lo mataron», explica una nota en la que la institución anuncia la suspensión, con el fin de permitir un análisis del ataque y una reevaluación del riesgo para su personal y sus pacientes.
«Necesitamos un mínimo de seguridad para llevar a cabo nuestra misión médica. No podemos trabajar si nuestra misión médica está amenazada por la violencia», explica Benoît Vasseur, jefe de misión de MSF en Haití.
En ese sentido, agregó, que no se puede aceptar «que ataquen nuestras ambulancias y golpeen y maten a nuestros pacientes. Para llevar a cabo nuestro trabajo, nuestras instalaciones médicas, nuestro personal y nuestros pacientes deben ser respetados».
«Vemos que los haitianos están desesperados y enfadados. Son objeto de terribles crueldades a diario. Lo vemos de primera mano: violaciones, torturas, intentos de asesinato. Todos nuestros servicios médicos están aquí para atender a la gente en medio de esta violencia», denunció Vasseur.