SANTO DOMINGO. – Basado en su experiencia de vida, Katherine Pérez, coach de bienestar y mentalidad, presentó “El amor de mi vida soy yo”, su primer libro, donde cuenta su propia historia en relación con su enfermedad, su crecimiento y sus relaciones familiares y amorosas, en función de cómo se pueden modificar creencias y encontrar el poder interior en ti mismo para así vivir en libertad, creando sueños y propósitos de vida.
En 2015, Katherine fue diagnosticada con Púrpura Trombocitopénica Inmune, una enfermedad autoinmune en la cual se ven afectadas las plaquetas y se producen moretones o hemorragias en el cuerpo. En ese momento, Katherine estuvo hospitalizada siete días, ya que sus plaquetas estaban en 7.500, cuando el mínimo normal era de 150.000.
Ese hecho llevó a Katherine a replantearse su vida y hacerse preguntas sobre su propósito, sus relaciones y cómo estaba impactando toda su historia, a su propia salud de esa manera. Así fue como estudió health coaching en el IIN Integrative Nutrition y comenzó a hacer cambios significativos para “vivir la vida que realmente quería tener”, rompiendo así paradigmas de su propia historia y superando la enfermedad que le hizo tener ese punto de introspección.
Con el objetivo de poder reflejar lo que no pudo su niña interior y expresar su verdad, decidió reunir en “El amor de mi vida soy yo” sus experiencias y preguntas que cada mujer puede hacerse en distintos puntos, para estar en plenitud. En este primer libro, las lectoras podrán además escribir sus propias apreciaciones y realidades sobre temas como propósito, creencias, emociones, autoconcepto, hábitos y sueños.
Con el lema “Mientras buscas lo que amas, disfruta lo que haces”, Katherine invita a las mujeres a vivir una experiencia donde el poder interior y las decisiones son las que marcan la vida. Asimismo, para poner en práctica parte de la experiencia y del conocimiento de su libro, la autora también cuenta con su “Diario de sueños y gratitud”, un espacio para manifestar y concretar lo que las mujeres quieran lograr.