Redacción Internacional.- Más de una semana después del trágico terremoto que devastó grandes regiones del sureste de Turquía, los servicios de emergencia aún logran rescatar a personas entre los escombros. Esta vez fue el turno de una mujer de 70 años, que pasó 212 horas sepultada bajo los restos de un edificio destruido en la ciudad de Gaziantep.
Tras un intenso esfuerzo de los equipos de búsqueda turcos, Fatma Gungor, de 70 años, fue sacada con vida entre las ruinas de un edificio de siete pisos y fue trasladada a un hospital para que recibiera atención médica.
Tras el rescate, los familiares de Gungor -que esperaban alrededor de los restos- abrazaron y agradecieron a los equipos de búsqueda y rescate por sacar con vida a la mujer, que llevaba casi nueve días sepultada.
Lo cierto es que la tarea de rescate se hace más difícil conforme cada hora que pasa, puesto que el tiempo estándar que un ser humano puede estar sin ingesta de agua o comida en desastres como este es de 72 horas.
Tras un intenso esfuerzo de los equipos de búsqueda turcos, Fatma Gungor, de 70 años, fue sacada con vida entre las ruinas de un edificio de siete pisos y fue trasladada a un hospital para que recibiera atención médica.
Tras el rescate, los familiares de Gungor -que esperaban alrededor de los restos- abrazaron y agradecieron a los equipos de búsqueda y rescate por sacar con vida a la mujer, que llevaba casi nueve días sepultada.
Lo cierto es que la tarea de rescate se hace más difícil conforme cada hora que pasa, puesto que el tiempo estándar que un ser humano puede estar sin ingesta de agua o comida en desastres como este es de 72 horas.