Redacción Internacional.- Devastadoras cifras siguen llegando desde Turquía y Siria como consecuencia de los terremotos que asolaron ambos países la semana pasada. El número de fallecidos asciende a más de 35.000, de los cuales 31.643 se han notificado en el país otomano según el último balance facilitado por Ankara. Por el lado sirio, la ONU cifra los muertos 4.300, frente a los 3.580 de los últimos balances del Gobierno del país y los rebeldes.
Los equipos de rescate continúan trabajando en ambos países y, a pesar, de que según los expertos las primeras horas después de un temblor son "cruciales" para encontrar supervivientes, los milagros se siguen produciendo.
Otro equipo ha logrado rescatar con vida este lunes a una mujer en la localidad turca de Antioquía, en la provincia de Hatay, que llevaba 175 horas bajo los escombros. Asimismo, una niña de cuatro años ha sido rescatada tras 178 horas entre los restos de su casa en la provincia turca de Adiyaman.