DOHA (AP) — El Mundial más exótico de la historia se ha reservado una página en blanco para un final memorable.
Argentina y el último campeón Francia definirán el domingo en el estadio Lusail el título de la primera Copa del Mundo disputada en Medio Oriente, que albergó sus partidos a fin de año en vez del tradicional calendario de junio-julio para evitar el agobiante calor.
Será un ahora o nunca para el astro argentino Lionel Messi.
En el quinto y último Mundial de su carrera, el capitán de 35 años mostró la mejor versión suya en el gran escenario para ganar el trofeo que le falta y subir el peldaño que lo iguale definitivamente a la leyenda Diego Maradona, o incluso superarlo.