Redacción Internacional.– Fuertes disturbios entre palestinos y la Policía israelí estallaron la noche del miércoles en barrios de Jerusalén Este poblados por árabes.
Los manifestantes arrojaron piedras, lanzaron cócteles Mólotov y fuegos artificiales, al tiempo que quemaban neumáticos y contenedores de basura. Por su parte, los agentes policiales respondieron con gas lacrimógeno y granadas aturdidoras, reseña el periódico The Times of Israel. En la mañana de este jueves la situación se normalizó.
Desde la Policía comunicaron que en el barrio Isawiyah dos oficiales resultaron heridos con carácter leve por metralla proveniente de supuestos artefactos explosivos improvisados. Paralelamente, nueve palestinos fueron detenidos a lo largo de la noche, lo que elevó a 23 el número total de arrestados en los últimos días de enfrentamientos, detalla el diario Haaretz.
El alcalde adjunto de Jerusalén, Arieh King, instó este jueves a los residentes a ayudar a proteger a los habitantes judíos en la parte oriental de la ciudad. Mientras, se espera que la Policía aumente el número de agentes desplegados en los próximos días para reforzar la seguridad.