Redacción Internacional.- El régimen chino expresó hoy su “preocupación” por “el desarrollo de la situación actual en Ucrania” después de que al menos 19 personas murieran y más de cien resultaran heridas en los bombardeos rusos del lunes contra ciudades ucranianas. Los ataques continúan este martes, siempre apuntando a infraestructuras civiles. Beijing se ha mantenido como el principal aliado de Moscú desde el comienzo de la sangrienta invasión el pasado 24 de febrero.
“China pide a las partes involucradas que resuelvan sus diferencias mediante el diálogo y las consultas”, aseguró la portavoz del Ministerio de Exteriores, Mao Ning, en rueda de prensa, según la prensa local. Sin embargo, el régimen conducido por Xi Jinping se niega a condenar las agresiones de Vladimir Putin.
Los servicios de emergencia de Kiev confirmaron que al menos 19 personas murieron y más de cien resultaron heridas en los bombardeos rusos del lunes contra ciudades ucranianas, y subrayó que muchos de ellos se dirigieron contra objetivos civiles, en violación del derecho internacional.
Rusia lanzó ahora una nueva serie de ataques, también sobre múltiples regiones, en respuesta a la destrucción de un puente clave de Crimea acontecida el sábado y atribuida por Putin a los servicios de inteligencia de Ucrania.
Los datos que actualiza periódicamente la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos indican que la invasión rusa en Ucrania ha causado desde su inicio hace más de siete meses al menos 6.221 muertos civiles y 9.371 heridos.
Desde el estallido del conflicto, China ha mantenido una postura ambigua durante la cual ha pedido respeto para “la integridad territorial de todos los países”, incluido Ucrania, y atención para las “legítimas preocupaciones de todos los países”, en referencia a Rusia.