Una compañía brasileña reconoció el viernes que abastece a las fuerzas de seguridad de Venezuela grandes cantidades de gas lacrimógeno para controlar las protestas contra el gobierno, lo que ha indignado a la oposición venezolana.
Condor Non-Lethal Technologies, con sede en Rio de Janeiro, confirmó que cumple con dos contratos que tiene con el gobierno de Venezuela después de que dirigentes de la oposición de ese país presentaron documentos que _dijeron_ muestran que las fuerzas armadas compraron en abril 78.000 cartuchos de gas lacrimógeno.
Los oponentes del presidente Nicolás Maduro dicen que han pedido a las autoridades brasileñas que han censurado la represión del gobierno venezolano que bloquee la entrega del gas lacrimógeno.
Condor dijo en un comunicado que no juzga las políticas de sus clientes. Pero señaló que suspender la entrega de productos como gas lacrimógeno, gas pimienta y balas de goma dejaría a las fuerzas de seguridad sin otra alternativa que usar armas de fuego.
Agencias